Me quejo cada día. Ni si quiera yo consigo aguantarme últimamente. La gente a mi al rededor cambia y yo sigo aquí, ahogada en mi misma, buscando un porque, una solución, un algo que cambie mi vida. Pero llevo equivocándome mucho tiempo porque ese algo que cambie mi vida esta en mi mano. Tengo que levantarme, sonreír y decirme a mi misma cada mañana: las cosas van a cambiar porque yo voy a hacer todo para que eso ocurra. Esa es la solución, yo misma y mi conciencia.
Y sé que será difícil pero quedarse sentada con un paquete de pañuelos y las lágrimas en los ojos no solucionan nada, solo te hacen sentirte peor cada momento, más desgraciada, y puedo ser muchas cosas pero en ningún momento he sido desgraciada.
La vida sonríe si tu le sonríes a ella.
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